Como deben imaginar, mi nuevo comienzo académico me ata a horas intensas de lectura junto a nuevas películas, y como parte del programa de formación, un profesor recomendó una película alemana titulada Die Welle (La Ola) 2008. En la que se basa una obra de teatro homónima representada los días viernes, sábados y domingos en los espacios del Trasnocho Cultural.
Como no han de saber, llevo una relación amor-odio con el cine alemán:
Sus gráficas y contenidos visuales me resultan extremadamente exquisitos pero odio los diálogos y las actuaciones; imagino que este choque me sucede al no poder entender nada de lo que dicen, pero más allá de entender o no, en mi opinión el código lineal en el que se expresan los alemanes no me resultada conmovedor, por lo que la actuación no me cae del todo bien. Para mi el alemán sólo se escucha de dos maneras: alto y más alto.
Sin embargo, esta película me mantuvo entretenido, en ella se ve una visión distinta del Tercer Reich y el tema del Holocausto, que a mi criterio la hace una buena muestra en los festivales de Cine Judío que se llevan a cabo al rededor del mundo (incluso en Caracas). A pesar de que "La Ola" no muestra herencias hebreas por ningún lado, permite comprender la situación cultural de ese momento.
La película profundiza en la psicología de jóvenes estudiantes, que vendrían a representar al pueblo alemán de aquel entonces (carente de un líder, sin rumbo o causa), un salón de clases (un territorio por el cual sentirse orgulloso y listo a defender) y un profesor que movilizará toda esta nueva "ola" (un líder), elementos que bajo una disciplina o reglamento, harán el ambiente propicio para un fascismo endógeno, del que a simple vista nadie parece percatarse.
Después de ver la película, me sentí asqueado de la necesidad humana de caer en el sometimiento, la volubilidad y la manipulación para sentirse miembro de algo, y me llevó a sacar profundas conclusiones acerca de la situación actual del mundo y sus gobernantes de turno, por ello me gustaría recomendarla y hacer que sea vista por tantos otros...
Al comienzo los alumnos explican lo imposible que parece después de haber vivido eventos tan terribles (Tercer Reich) , que el hombre pueda cometer nuevamente la misma falta, y de cierta forma ellos están en lo correcto; pero no pensaron en la posibilidad de que un nuevo hombre, bajo una nueva época, comete nuevos errores, incluso más terribles que todos lo anteriores.
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El comentario final ( no puede faltar): uno de los códigos disciplinarios que hacen que un colectivo se sienta unido, es el uso de un uniforme. Para los chicos de este instituto, el profesor asignó camisa blanca y pantalones de mezclilla (jeans) ... y vaya look . Todos parecen salidos de una campaña publicitaria de D&G, nada que ver con los infames trajes verdi-grisáceos, los ridículos pelos engominados y el bigotillo nazi #YUK
Fotos: Cortesía de" Die Welle 2008"
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