Mentiría al decir que no fue un día memorable, un día de inicios, uno de esos en los que te das cuenta de todo lo que tienes por delante y lo que has dejado atrás; en los que ves lo que tienes y lo que te hace falta, aquello que disfrutas y lo otro que está sobrando.
Piensas las cosas bien, meditas lo que debes aprender, todo parece cacofonía, todo simula seguir un curso ya preestablecido, moviéndose a tirabuzones va de lo tangible a lo irreal.
Resulta ridículo pensar entonces, cuanto dependemos de otros (seres, espacios, momentos) para lograr esa sensación. Me propongo cambiar.
Photo: Daniella B / Bazar Poupée 24-10-10
No hay comentarios:
Publicar un comentario